Redaccion | Marzo 05, 2015
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Los resultados arrojados por el primer sondeo realizado sobre las próximas elecciones andaluzas del 22 de mayo, llevado a cabo por el CIS, el ente del Gobierno español encargado de este tipo de estudios, auguran una especial tendencia, que bien podrían valer para las otras tres consultas en las urnas. En un año, por demás crucial, en que se acabarán las especulaciones y llegará la hora de la verdad.
La pasada medianoche comenzó una campaña que ha despertado un gran interés en toda España y que patentiza una constatación muy contundente: se desmorona el actual bipartidismo, que ha hegemonizado el poder en España desde su transición a la democracia, y que “acaparaba” el 80% de los votos para el PSOE y el Partido Popular.
Los socialistas están en el poder en Andalucía desde que España volvió a la democracia tras el fallecimiento del dictador, Francisco Franco.
El estudio demoscópico señala que los socialistas reunirían cerca del 34,7% de los sufragios. Sin llegar, en ninguno de los casos, a la mayoría absoluta: “Les faltarían once escaños para llegar a los 55 que se requieren para ello”.
Esto último, obligaría al PSOE a pactar con otras fuerzas políticas.
El PP, triunfadores de las elecciones anteriores, alcanzaría el 25,7% de las papeletas. Con lo cual, perdería unos 16 diputados y pasaría, de contar con 50 escaños, a ocupar sólo 34.
La nueva fuerza “librepensadora”, que ha puesto de cabeza toda la política española, “Podemos”, herederos de los “Indignados”, se constituiría en la tercera fuerza, con más del 10% de las preferencias, con lo que llegaría a los 22 representantes.
Por otra parte, Izquierda Unida, sería el partido que perdería mayor caudal y pasaría de los 12 diputados actuales, a tan sólo cuatro o cinco.
Un porcentaje bastante similar, 6,4%, lo obtendría la otra fuerza renovadora, liberal de centro derecha, Ciudadanos, que lograría una bancada de cinco diputados.
Las afinidades acercan a los socialistas, Izquierda Unida y Podemos. Pero los acuerdos son muy complicados, porque Podemos responsabiliza a los socialistas de haber integrado la “casta” que se ha repartido el poder todos estos años y, por tanto, grandes culpables de lo que califican como una catastrófica situación social y económica.
Algo parecido es lo que sucede con el caso de Ciudadanos, que crece muy aceleradamente gracias al abandono de gran parte del electorado de los populares, y que no ahorra en críticas al Gobierno de Mariano Rajoy.
La encuesta consolida el liderazgo de Susana Díaz, que ha logrado detener la caída libre de los socialistas. Presidenta de la Junta Regional y valedora de Pedro Sánchez, el nuevo secretario general del PSOE. Díaz, es en estos momentos la más fuerte de todos los líderes del socialismo español.
Pero el estudio, y el clima político en general de Andalucía y el resto de España, apunta hacia un creciente deterioro del PSOE y del PP frente a Podemos y Ciudadanos, cuyas pujanzas deberán ser verificadas en las cuatro consultas que se llevaran a cabo este año, incluidas las generales en diciembre.
En estos comicios, Díaz trabaja para mantener el Gobierno autonómico. Pero también para todos los candidatos socialistas que se presentarán a las elecciones municipales de mayo, donde el PP mantiene su fortaleza en las ocho capitales de provincia y en las ciudades de más de 50.000 habitantes.
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