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NOTICIAS | NATURALEZA
El volcán de Isla de Fogo se eleva 2,829 metros sobre el nivel del mar y entra en erupción aproximadamente cada 20 años
El volcán de Isla de Fogo se eleva 2,829 metros sobre el nivel del mar y entra en erupción aproximadamente cada 20 años

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Un equipo científico del Reino Unido descubrió que el formidable colapso repentino de los flancos laterales de un volcán, hace 73.000 años, desató una gigantesca y letal ola de casi 1.000 pies de alto, unos 300 metros. La más grande jamás observada en el registro geológico.

Pero, lo realmente grave, es que los especialistas han advertido que un catastrófico “mega-tsunami” similar al sucedido en aquel entonces, podría volver a suceder en el futuro.

El volcán de la Isla de Fogo, en Cabo Verde, el culpable de desencadenar aquella colosal ola sin precedentes, sigue siendo una de las calderas, en activo, más grandes del mundo.

Y, repentinamente, volvió a entrar en erupción a finales del año pasado.

Con tanta fuerza, que los sismólogos señalaron que la erupción del mes de noviembre pasado, fue una de las más potentes jamás registradas en el archipiélago.

El estallido, causó la preocupación de los expertos vulcanólogos de todo el planeta, que temen que una nueva erupción, mucho más intensa, pueda enviar un devastador mega-tsunami a través de todo el Océano Atlántico.

Los académicos, pertenecientes a la Facultad de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Bristol, Inglaterra, sostienen que la amenaza de un nuevo episodio de tales magnitudes: “Representa una amenaza real para la humanidad hoy”.

El equipo de especialistas ha logrado desentrañar, en fechas recientes, los aterradores detalles ocultos tras el antiguo desastre natural causado por el volcán de la Isla de Fogo. Las olas fueron tan poderosas que lanzaron piedras del tamaño de un vehículo de reparto sobre las montañas de la Isla de Santiago, a más de 30 millas de distancia.

El investigador principal del equipo, Dr. Ricardo Ramalho, ha advertido que una ola de tal magnitud, del doble del tamaño del Big Ben, causaría una destrucción incalculable sobre gran parte del planeta.

“Nuestro punto, es que el colapso de los flancos del volcán puede ocurrir de una manera vertiginosa y muy catastrófica y, por tanto, ser muy capaz de desencadenar un gigantesco tsunami”, dijo el científico.

“Debemos tener esto en cuenta cuando pensemos en el peligro potencial que representan este tipo de volcanes”, agregó.

“Este hallazgo se yergue como una advertencia que nos indica que el riesgo potencial del colapso lateral del flanco de una isla volcánica no debe ser subestimado y que nuestra sociedad tiene que hacer más esfuerzos por mejorar su resistencia frente a este tipo de amenazas”, señaló.

“Tenemos que estar muy vigilantes”, advirtió.

“La energía potencial para un nuevo colapso está allí, presente. Lo que no sabemos… es cuando va a suceder”, sentenció.

El mega-tsunami prehistórico recién descubierto, tuvo lugar tras una erupción repentina que provocó un deslizamiento gigantesco de tierra en el archipiélago de Cabo Verde, en la costa de África Occidental.

Gigantescas rocas, con un peso de hasta 770 toneladas cayeron al océano, liberando un tsunami de unos 800 pies de alto, 244 metros, que afectó la cercana Isla de Santiago.

En proporción, la ola del tsunami Boxing Day de 2004, el tsunami más grande de la historia reciente, sólo alcanzó una altura de unos 100 pies. Aún así, mató a alrededor de 220.000 personas a todo lo largo de la costa del Océano Índico.

Sin embargo, el profesor Bill McGuire, un experto en tsunamis del University College de Londres, llamó a la cautela.

Afirmó que tales eventos de mega-tsunamis ocurren sólo una vez cada 10.000 años.

Sin embargo, agregó: “La magnitud de este tipo de eventos y su impacto potencialmente devastador, como demuestra el estudio del volcán de Fogo, los convierte en un peligro evidente y serio para las cuencas oceánicas que albergan volcanes activos”.

A principios de este año, el reconocido físico Michio Kaku de los Estados Unidos, advertía que: “Hace largo tiempo que se espera que un desastre natural de proporciones titánicas golpee la Tierra”.

Kaku dijo: “No es una cuestión de si va a suceder o no. Es una cuestión de cuándo...”

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